viernes, 31 de enero de 2014

Palabras

¿Será tal vez mejor verter palabras
que relegarlas al mundo del olvido?

¡Cuántas veces he contenido ese impulso irrefrenable
y me he guardado lo que sé que tenía que decir!

El silencio no es más que un arma,
tantas veces cómplice de nuestra cobardía

de nuestro miedo

de nuestras inseguridades

y por eso en el momento en el que el verbo es liberado
todo cambia

todo fluye

todo sale a la luz.



Palabras, palabras, palabras...
ascuas incandescentes tan útiles como peligrosas,
tan necesarias cuando las controlas,
tan letales cuando no tienen dueño.

Quisiera ser dueño de mis palabras y romper con el estigma
de ser siervo del silencio
y asentir complaciente
por miedo al rechazo
esperando el vano premio de que alguna mente débil
me mire con cariño
como a un ingenuo niño
que se cree todo sin criterio

sin argumentos...

palabras.

lunes, 20 de enero de 2014

Vete

¿No crees que ya llegado es el momento
de que dejes morir lo que ha acabado?

Tu tiempo, tus esfuerzos y tu orgullo
merecen un final más agraciado.

No alargues la agonía, amigo, vete;
escápate y no vuelvas la mirada.
Que es mejor estar solo y orgulloso,
que sentir en tu espalda las miradas
que te juzgan sin ver tus sentimientos,
tu generosidad, tu amor, tu miedo,
tu aferrarte a ese triste clavo ardiente
que mitigue el dolor que ni has buscado
ni mereces por todo lo que has dado.

Al final no era eso, equivocado
has estado estos años y confiado,
descuidaste la guardia y te han matado
la alegría, el valor, tu ser honrado:
Pues no hay nada que hacer: Cierra la puerta,
despídete y prosigue tu camino.
No esperes ser premiado, tu fracaso
no va a ser compartido; es tuyo sólo.
Pero no te preocupes: Faltan tantos
que un día olvidarás lo que ha pasado,
y vendrán más tristezas, más portazos,
sinsabores, tristezas, amarguras:
Pues la vida es así, lo que más dura
en este devenir es la tristeza,
que llega hasta el final desde que empieza
y se acaba al llegar la sepultura.