miércoles, 4 de diciembre de 2013

Veneno

Nunca una mordedura provocó tanto daño.

No era un veneno rápido, de los que matan,
era uno lento, una ponzoña que ya nunca salió del cuerpo de la presa.

Desde ese día un dolor intenso pugna en sus entrañas y nunca acaba

nunca cesa

                                              nunca mata.


¿Volverá la salud a la sangre?
¿sanará algún día?

El miedo al ofidio no le deja vivir y la presa se debate,
lamiéndose sus viejas heridas:

¿Volverá a morder? ¿Volverá a atacar?

Y ahora sólo miedo: A que vuelva el dolor,
a que esté agazapada esperando un descuido,
a que se lleve su camada...
esperando que tal vez un día abandone su cueva
y parta a algún lugar lejano
en que su veneno deje de hacer daño.

martes, 26 de noviembre de 2013

Noche

Oscuro espejo en el que nos quedamos solos con nuestros miedos.

Noche.

¿Qué tienes que atraes y das miedo por igual?

Casi todos los buenos momentos confesos se pasan de noche

... y sin duda el total de los más inconfesos.

Noche, metáfora del mal tantas veces:
(La Noche Triste, la Noche de los Cristales Rotos...)
y sin embargo perfecta cuando han querido que lo seas
(la Noche Oscura del Alma, la Ronda de Noche)

¿Por qué yo mismo que te escribo
no entiendo en qué le ganas al día
y sin embargo sé que el negro de la tinta
es el negro de la noche?

¡Cuánto miedo he pasado de noche
esperando la luz que trajera otro día;
cuántas lágrimas tristes vertidas de noche
recordando en mi insomnio riquezas perdidas!

Noche. Siempre noche.

En ti han quedado mi primer beso y mi madre arropándome en la cama,
en ti he vivido entre vinos comuniones de guitarras y de amores,
en ti he tenido todo lo bueno de esta vida
y en ti he tenido todo lo malo de esta vida.

¿Por qué, noche, por qué serás tan noche
y nos provocas en nuestro imaginario
haciendo que escribamos, que cantemos, que pintemos
tratando de deshacer una madeja
que sabemos va a estar siempre embrollada?

No quiero saberte, noche, sólo quiero otra vez que deslumbres
con tus miles de estrellas de una noche clara
y que asustes con truenos tremendos al mundo

                                                                                                   y que tiemble al sentir una luz en tu seno...


Tal vez lo único cierto es que un día es la metáfora perfecta

de una vida.

sábado, 16 de noviembre de 2013

En el ángulo oscuro

Del salón en el ángulo oscuro
¡Otra vez del salón en el ángulo oscuro!
¿Qué tendrá del salón ese ángulo oscuro
que me mira y me llama y me coge y me tuerce?

Del saber en el ángulo oscuro
¿Qué tendrá en el saber ese ángulo oscuro?
¿Qué belleza de oscuro saber me amenaza?
¿Qué sentir traicionero me vuelve navaja?

Del saber en el alma hay oscuro
¿Qué me pasa que dentro hay oscuro?
¿Qué me duele que vuelvo a ser puro?
¿Qué rincón en el angulo oscuro del alma
se vuelve en un cuarto el sonido del arpa?

martes, 5 de noviembre de 2013

Génesis

Mi colina es un cerro adornado de árboles,
debajo está la choza en que me guardo,
que va y viene conmigo adonde vaya
como van las tortugas a cuestas con su casa.
Horizonte infinito de dehesas.
Una manada baila como un todo,
detrás parece guiarlas una fiera
que la hace huir, correr, desesperada.

El sol ya va quemando toda mi piel desnuda.
No puedo avergonzarme: Mi alma es pura.

Hoy no quiero cazar, me acerco al río
y las aguas mi cuerpo sucio envuelven
mientras ella, coqueta, se acicala
con su peine de cuerno de venado.

Me embadurno en el barro de la orilla
Los mosquitos me están mortificando
parecen encontrar mi sangre ardiente
su manjar favorito en la llanura.

¿Qué me depara el día? ¿Un sol radiante?
¿O una lluvia que al fin mi piel refresque?

Las sombras son pequeñas: mediodía,
 no hay nadamás que hacer, vivir la vida;
no sé lo que es pudor,
ni qué es vergüenza:
Mi mente aun no ha perdido la inocencia

Encuentro una piedra afilada y dura,
con un extremo romo a modo de hendidura;
busco una vara larga y la sujeto:
Ya tengo un arma nueva; el cómo es mi secreto.

Todavía no hay nadie que posea nada,
porque Dios nos permite aun ser puros
mantener la inocencia animal e inmadura
y nadie está desnudo,
porque no hay vestiduras.

Todavía no importa haber matado a otro,
pero sentimos pena cuando se van los nuestros.
¿Nos volvermos pronto pecadores?
¿Despertará por fin lo que no es bueno?

Un día habrá muy pronto,
con hombres adornados
sus vergüenzas cubiertas
cometiendo pecados
alguno tendrá algo
y querrá algo de otros.
romperemos al mundo nuestros votos;
pero ese aciago día
por suerte aun no ha llegado,
y aun somos como niños
aun despreocupados.


Llegarán las parejas,
las llamaremos nuestras,
pronto querremos más
de lo que da la tierra...

Pero aun vamos desnudos
y aun corremos libres
dejando a nuestros muertos
atrás para las fieras.
No hay nada que nos turbe
sólo la dulce espera
de feliz recompensa
y de indómita entrega.

Pequeños, inocentes, sin consciencia de nada
desonociendo el día en que el pecado
va a mancillar la tan perfecta obra
de un ser que es superior y que domina
al mundo alrededor y participa
del ciclo siempre justo de la vida:
Tu me matas, te mueres y termina.

martes, 15 de octubre de 2013

Soledades

Cuándo subí en el tren no lo recuerdo,
seguro que no fue hace mucho tiempo,
pero observo el paisaje inexorable:
Ahora hermoso, ahora hostil, por siempre eterno.

Siempre en cada estación voy conociendo
y cambiando al partir...¡Qué andar tremendo!
Ya no sé si me guía el maquinista
o sólo lo hago yo ¿destino?
                                                              Incierto.

Los vapores, los humos, los chirridos,
el pitido del tren, el traqueteo;
ahora estoy disfrutando del paseo
pero a veces me angustio y me mareo.

La vía está engrasada todavía;
los raíles brillantes, relucientes,
me muestran que aun me quedan por delante
estaciones sin fin por el desierto
hasta llegar por fin a la parada
final en la que el mundo se me muestre
sin velos, sin tapujos, sin charadas.

Pero yo no me engaño, tantas veces
lo vi descarrilar que desconfío
de este tren tan flamante que he cogido.
Es posible que cuando se me anuncie
mi estación de llegada no me atreva
a usar esa parada y aun que alegue
que no estoy preparado, y que no baje
y que entre dos vagones me retuerza
entre dudas y miedos ¿Fue la mía?
¿Era esa la estación? ¿Se ha terminado?

Y no sabré hasta el fin si ha sido hermoso
el viaje que imprudente yo he escogido,
ni si los pasajeros adecuados
son los que mi vagón han compartido,
pero espero que en el andén me diga
el mozo de estación o el que me atienda
que mi orgullo está intacto y que el retraso
me pagarán con creces. "Las molestias,
serán recompensadas, no lo dude"
Porque así es el vivir, hay quien se achica,
pero el que no es cobarde a este tren sube
con sus penas, sus trampas y sus dichas.

miércoles, 9 de octubre de 2013

Nordés

Responder con premura las preguntas;
así es la sociedad impacientada
que ha desdeñado el plácido devenir del tiempo
intranquila, apurada.

Ya no nos queda tiempo.
Hemos querido consumirlo agarrados, asidos a lo eléctrico.
No tenemos claro para que sirve nada,
pero lo anhelamos firmemente.

¿Qué son todas esa siglas y anglicismos
que nos llenan la mente?
Inventaron cartas inmediatas: Pues benditas sean,
pero ¿Qué necesidad de decir cosas
nos aterra cuando nos despojamos
del infernal artículo de saldo
con sus luces, botones y sistemas?

Me he sentado a la orilla de un río
sí, lo sé: otra vez me he sentado a la orilla de un río.
Esta vez no he mirado sus aguas.
He intentado seguir a un acuático insecto que posaba sus patas en ella.
No he mirado los rayos que atraviesan el bosque,
no he mirado el reflejo verdoso,
no he escuchado al murmullo armonioso del baile tranquilo del viento y las hojas...

He dormido a los ruidos y estruendos,
he acallado los gritos, motores, rugidos, los insultos, pitadas, ladridos
he escuchado a mi mente.
Y no dijo nada.

No sé si es bueno estar tan lejos de mí
ni si es bueno estar lejos de ti.

¿Pero realmente importa dónde estamos cuando nuestro espíritu despierta?
Sinceramente: La vida son dos días de crepúsculo,
porque del amanecer ¿Quién se da cuenta?

El día que yo falte quedarán mis letras, ya gastadas, romas, sin aristas...
y es posible que sin nadie que las lea,
pero eso no me importa:

Serán letras.

sábado, 5 de octubre de 2013

Piel de toro

Otra vez en Atocha,
el tren se rompe.
El retraso al final es mitigado
por un pequeño tipo afeminado
que reparte la prensa.

Me siento un poco raro.
El respaldo del sitio en que me siento
se ha soltado.
La máquina, por fin, es arreglada
y la vía deja de ser serpiente
y ya es Camino al Sur.
Estoy en marcha.

El papel lenitivo que me han dado
empieza a hacer lo que no han deseado.
Noticia tras noticia me cabreo,
me indigno, sobresalto y asustado
pienso que lo que leo esta infectado:
Uno reclama ayudas por cultura,
sin decir que es su sueldo a lo que ayudan.
Otro circo mediático lanzado:
Una niña que ha muerto
(pobre Asunta)
los padres son seguros condenados.
Aunque no saben nada contertulios
comentan los detalles de la cosa,
otra página más, noticias rosas
otro que una vez más se ha divorciado.

A la prima de riesgo se le une una hermana
que se llama injerencia del estado.
Un ministro hincha el pecho, despechado,
¿Es que nadie va a ver lo que he logrado?

Un patético rey, un mercachifle,
de un trozo de mi España ha declarado
que existen otras vías que la suya
para lograr el precio que ha pactado
para que lo sostengan en su trono
unos torpes soldados del pasado.

Al odiado gestor del ex-alcalde
a pasar por prisión le han condenado
y a una multa que jamás va a ser cobrada
de una ínfima fracción de lo robado.

Luego un poco de azucar: Cuatro goles
un feliz natalicio y el tenista
de zurdo hercúleo brazo que ha logrado
volver al número uno de las pistas.

El tren renquea de nuevo y lo detienen
el retraso ya es largo y agotado
desde la Villa y Corte ya mi aguante
se va acercando al fin: Estoy hastiado.

Y entonces veo el porqué
(que torpe he sido):
Otra vez el Señor me ha preparado
una puesta de Sol en Puertollano,
y al pasar por sus tierras y encinares
se me apaga la mente y todo el ruido
me deja de abrumar: Estoy dormido.

miércoles, 4 de septiembre de 2013

Te coge trabajando

Y me pregunto de pronto:

¿Donde viven los versos?
¿Nacen de repente o estaban dentro?

Te recuerdo, hermosa, preparando tu boda
tan pura, ilusionada, tan joven, tan osada...

¿Vive una escultura en el tronco de un árbol?
¿Espera tal vez a salir de la madera?
¿O vive en las manos y en la mente del escultor?

¿Qué es el amor, ofrenda o egoísmo?
¿Queremos porque nos hace más felices
o somos más felices porque queremos?

Me pregunto que pasa si alguien tiene una idea
y no sabe escribirla, cocinarla, pintarla
si no sabe esculpirla, reflejarla, mostrarla.

En mi mene hay un cuadro de unos hombres de blanco
que luchan contra el negro
mientras el sol se esconde. 

¿Un trozo de granito es una estatua
esperando el cincel que la modele?

Tal vez sé la respuesta y me incomoda...
¿Osaré responderme?

La luna de mi infancia era más grande

                                                                                         y mis sueños.

Una hoja en blanco, la pantalla
mis dedos con la pluma o un teclado.
Si muero de repente se morirán mis versos
¿Cuando se acaban?
¿Cuando alguien deje de leerlos?

Tu primera caricia aun habita en mi piel
me curó de mis penas, me hizo bien.


Si algún día las musas me abandonan y esto
me olvidé de escribirlo
¿Acaso habrá existido? ¿Existirá el poeta?
¿Trascenderán sus letras a su pobre existencia?

Una calle me espera porque voy a buscarte
... la lluvia y su presencia: Tú llegas siempre tarde.
Pero es parte del trato: Te prometo esperarte.

No lo cuentes, tranquilo ¡Qué inquietud más humana!
¿Les agrada? ¿Me aprecian?
¿Si lo vendo me pagan?

Jamás un verso puro
de la mente de un hombre ha salido.

sábado, 10 de agosto de 2013

Miedo

Soledad y oscura noche,
llega el miedo
las tristezas y añoranzas
y el de menos.

Cuan cierto es que en la alegría
no existen necesidades
pero en la noche cerrada...
qué miedo que me da el miedo.

Soledad, oscura noche,
un relámpago y un trueno.
Quiero a tu mano agarrarme
y un te quiero,
quiero un abrazo muy tierno
pero quiero que sea eterno,
porque oscura, oscura noche
en tus sombras estoy dentro.

Cuando salgan las estrellas
seguiré teniendo miedo
porque estoy sólo en la noche
en la oscura noche oscura
y el miedo sólo lo cura
sentir que no eres tu dueño.

Locura de oscura noche
abandóname, que quiero
que se vaya el miedo miedo,
que quiero un te quiero ahora
y un relámpago ilumina
mis terrores y estoy solo
y no quiero ya sentirlo
porque un te quiero que tenga
a la soledad le gana
y en medio de la tormenta
aparece una mañana.

sábado, 3 de agosto de 2013

Brumas

Se va desperezando la mañana y una neblina nos abraza con su frío y húmedo manto. Se oye una flauta, invariablemente. Hay un hombre tras las hojas de los árboles que comienza su letanía incansable. En mi cabeza no escucho la música... cando penso que te fuches... escucho ruido en la cocina, alguien más se ha levantado. Respiro la humedad, que trae olor a ría y a maleza... negra sombra que me asombras... algunos transeuntes empiezan a entrar en escena, la cara recién lavada. Ya no se oyen coches, los han enterrado y a mí no me importa; me gusta. Un abuelo tempranero lleva de la mano a un niño... ó pé dos meus cabezales... están los dos felices, el abuelo y el niño. Tal vez el abuelo piensa que esta vez sí hay futuro, que esta vez sí hay esperanza. Dos peregrinos despistados entran en escena ¿El camino de Santiago, por favor?... tornas facéndome mofa...

El sol se aúpa un poco más. Ya llega el sol a casi toda la plaza... cando maxino que es ida, no mesmo sol te me amostras... pasa un grupo de gente, no muy numeroso, que reivindica algo. Ya no importa qué, todo cambio es necesario... i eres a estrela que brila, i eres o vento que zoa... Casi nadie vive ya esperando algo mejor, todos queremos que al menos se mantenga lo que tenemos. El viejo reloj suena como lo ha hecho desde que tengo recuerdos. Se ha parado y sus agujas aciertan dos veces al día en la hora, como otros aciertan dos veces en su vida en sus decisiones...si cantan es tí que cantas, si choran es tí que choras... ¡Por qué tiene que ser todo tan difícil! ¿Por qué tiene que ser todo tan difícil?... i es o marmurio do río, i es a noite, i es a aurora... ojalá los que nos sigan no tengan que ver esto ¿Quién mató mi patio de recreo? ¿Es que ya no queda compasión? ¿Ya no hay futuro?... en todo estás e tí es todo... ojalá alguien nos sacara de aquí, ojala existiera alguien valiente... pra min i en mi mesma moras... Yo no pienso quedarme sentado. Me da igual el subsuelo, el pavimento rojo, los cedros que se fueron y los que vendrán. Quiero ser distinto y ofrecer mi sonrisa... nin me abandonaras nunca... quiero ser el abuelo que lleva orgulloso a su nieto de la mano. Quiero mirar atrás y decir que era posible, y que yo sabía que era posible... sombra que sempre me asombras... no pienso resignarme y decir que es por que no hacemos barcos, ni porque no hay trenes. Espera. La flauta se ha callado. Se ha ido la bruma y se ha llevado su abrazo. Tal vez pronto salga el sol.

domingo, 21 de julio de 2013

Soy

Ahora sí:
Mi mirada ha vuelto al gris.
El espacio está callado,
soy aquí.

Soy consciente de eso mismo...
soy aquí.

Cuando falta no es mi esencia
en la que vivo.
Si no estoy es decadencia.
Aquí soy, yo soy aquí.

Y ahora mismo, en este instante,
aquí estoy,
luego el mundo puede verme
porque soy.

Ahora mismo mi mirada
está en el gris.

Yo soy aquí.

jueves, 27 de junio de 2013

Guanche

Aprovecha el momento y dame un beso

¿Estás loco? ¿Y si alguien me está viendo?

¿Qué me importa? Tan solo sé que quiero
Morir entre tus brazos un momento.

Pero a ella no le importa y lo abandona
a merced de su suerte ¡Qué le importa!
No es suya, no es de nadie, no es su dueño.
Y por mucho que espere recompensa
se va a quedar tan solo en eso: Un sueño.

¡No te vayas, espera, necesito
que me arrulles un poco! ¡Tengo miedo!

Y ahora encima cobarde ¡Que vergüenza!
¿Después de provocarle tanto miedo...!

Volverá tras sus pasos, al principio
¿Por qué empecé a quererle? ¡No lo entiendo!
Recuerdo sus halagos, sus sonrisas,
pero no los motivos que me hicieron
querer sólo con él pasar mi vida.

El mencey los contempla desde lejos
¿Qué le pasa a mi hija? ¿La princesa
necesita que actúe y la defienda?
Convoca a los ancianos de la aldea
y de muerte deciden la sentencia.

¿Que delito, Agoney, has cometido?
¿Subiste al viejo Teide, a lo prohibido?
¿Te bañaste en las aguas de las charcas
de Anaga en luna llena? ¿Cómo ha sido?

No, dice el muchacho fiero, altivo;
no hay delito peor que lo que he hecho.
¿Tal vez mataste a alguien escogido?
Peor, responde el pobre: He querido.

jueves, 20 de junio de 2013

El parque

Lluvia.

Los jardines de San Roque
están viendo sus abrazos;
con la experiencia que tienen
se me están ruborizando.
¿Otra vez acogeremos el despertar de dos cuerpos?

Otoño, hojas...
                                                       luz tenue y apacible.

Dejan atrás casa Antón
"Algún día te rescataré de esa torre,
porque tú eres mi princesa"
Ella se ríe, lo golpea
                                            y corre.

Se escucha a un pavo chillar
"¿Pero qué es esto que siento?"
Apenas ha dejado de ser niña
y ya siente un calor que le despierta,
y viene de los labios.

El la persigue, arrogante,
como haciendo un sacrificio,
y al llegar a la escalera
se gira hacia el edificio
y en sus colores granates
reconoce su suplicio.

"¿Pero qué me está pasando?"

Ahora, al entrar en el parque,
se la encuentra, más serena.
En su rostro, ya seguro,
hay un atisbo de pena.
Se acerca a un banco y se sienta
a la sombra de una acacia.
El se sienta algo apartado,
y con cierto disimulo
se va acercando a su lado.

Una ráfaga de viento frío.

¿Llegará nuestro amor a primavera?
estremecida se pregunta ella.
¿Querrá darme otro beso como el de antes?
Disimula él muchacho, temeroso.
(Su máscara de héroe es sólo eso:
le apena no saber si fue un buen beso).

Pero a ella no le importa si él sabía
¡Fue el más maravilloso de los días!
Unos viejos los miran con descaro
"Lo nuestro pasó igual
                                                                hace unos años"

Noche. La lluvia cesa.

A la trémula luz de una farola
un último achuchón
"Te querré siempre"
El chillido de un pavo, lluvia y viento.
El otoño en el parque

Y otro beso.


martes, 18 de junio de 2013

Y va bajando la marea

Después de haber tenido
la pelea más fea
he salido de casa como huyendo
¿A donde irán mis pasos
a los que por desgracia
no guía mi cabeza?
Esta es la vez primera
después vendrán más veces
en las que el corazón acelerado
me lleva en rumbo incierto
                                                                  hacia algún lado.

Atrás esa ciudad está quedando,
ciudad que vió forjarse a mi carácter,
ciudad de lluvia y gris,
ciudad amable,
amarga y dulce a un tiempo
y adorable
a la que alguna vez también he odiado.

Estoy en ese puente,
ese refugio
para los que regresan
de un exilio
a veces voluntario y no forzado,
y a veces salvación del que está harto
de ver pasar el tiempo sosegado.

Me paro y el porqué no está muy claro;
es como si una fuerza que no entiendo
me obliga a ya no andar
¿Qué habrá pasado?
Se está poniendo el sol
y entre las nubes
inunda mi mirada un sólo rayo.

Es alguien que me habla y que me dice
¡Detente! ¿Dónde vas?
¡Regresa, osado!
las ganas de llorar me van dejando
y reposo mis brazos derrotado
con mi mirar abajo,
                                                a lo mojado.

Y veo la marea como baja
y arrastra entre pilares un sargazo
de algas y algo más que se ha pegado,
y siento que esa masa es mi pecado
que se aleja de mí:
Ya estoy curado.

Allí está mi niñez, en ese puente.
Siempre supe que el fin había llegado
y cuando regresé sobre mis pasos
el niño quedó atrás
y confiado
la vida por los cuernos he encarado.
Ya me he vuelto mayor
Ya soy el hombre
porque del sufrimiento algo he sacado.
Soy mayor, mis errores ya son míos.
Jamás me excusaré si en algo he errado
miradme ya orgullosos:
He llegado.

lunes, 17 de junio de 2013

Adolescencia

Flor callada, flor pura, silenciosa.
Tesoro oculto de mis anhelos.
Noches de sudor y sueño.

Adolescencia.

Los pulmones pequeños, encogidos,
la vergüenza
ser tal vez el peor ¿Qué significa?
Es la inseguridad
                                     la sed
                                                             tu vida.

Un olor a humedad, a lluvia, a musgo.
La furtiva mirada que te acecha
Siempre un nuevo sabor, una botella
la guitarra en la mano
y en la otra, cerveza.

Sueños huecos de amor
miedo ante el sexo
(miedo a decir que sí
y miedo a decir que no)
¿Es esto que he sentido algo parecido al amor?

¿Lo es?

Tengo miedo de vivir y de crecer.

Y ahora vuelvo a mi casa
pies mojados
también mi corazón en un puño cerrado.
Otra vez sin un beso.
Otra vez sin un hola.
Otra vez sin te quieros.

Y en la habitación el ritual no aprendido
que han seguido ignorantes
tantas generaciones:
Esconder los secretos,
observar el espejo
y seguro y confiado
revivir un recuerdo.


Me desnudo y mi cuerpo
esquivo avergonzado,
justo ahora ha empezado
su visión a turbarme.
¿En qué me he convertido?
¿Por qué ha pasado esto?
La nariz, ese vello, el acné, esos gallos
¿Qué me lo ha provocado?
Decid ¿cuando ha pasado?

Y ahora todo: las notas
mis hermanos, mis padres
suponen un estorbo
¡Esta vida es un rollo!

¿Pero acaso creéis que soy como vosotros?
¿No os dais cuenta de que ella ha llegado?
¡Ya está aquí!
¿Es que acaso no la veis?

¡Ay, si fuerais capaces de entender, ignorantes,
que no hay nadie como ella!
Tan hermosa, tan pura, tan honesta
y distante...

y tan llena de vida.

Vosotros, algún día, vendréis a disculparos.
Necio mundo,
que ni siquiera ha alcanzado a darse cuenta
de que sólo nació para nosotros
para mí
                              para ella...
que ojalá que un día me hable y se de cuenta
del porqué de todo.

Ojalá que algún día se dé cuenta de mí.